La mayoría de los jóvenes menores de 21 años que desarrollaron una inflamación del músculo cardíaco relacionada con la vacuna Covid-19, conocida como miocarditis, presentaban síntomas leves que mejoraron rápidamente, según una investigación publicada hoy en «Circulation». La miocarditis es una patología poco común pero grave que causa inflamación del músculo cardíaco. Puede debilitar el corazón y afectar el sistema eléctrico del corazón, responsable de mantener el latido regular del corazón. La mayoría de las veces es el resultado de una infección y / o inflamación causada por un virus.
Con la llegada de las vacunas de ARNm para el Covid-10 se informó de un posible vínculo entre la vacunación y la miocarditis, especialmente en las personas menores de 39 años.
Sin embargo, «los casos de miocarditis relacionados con la vacuna son poco frecuentes y en su mayoría leves», comenta Donald. M. Lloyd-Jones, presidente de la Asociación Estadounidense del Corazón, que no participó en el estudio.
Y añade: «Los datos continúan indicando que los beneficios de la vacuna CovidD-19 superan con creces los riesgos muy raros de eventos adversos, incluida la miocarditis».
Hasta ahora, las tasas más altas de miocarditis después de la vacunación se han reportado entre adolescentes y adultos jóvenes varones. «Investigaciones anteriores muestran que este efecto secundario poco común está asociado con algunas otras vacunas, sobre todo la vacuna contra la viruela», asegura la autora principal del estudio, Jane W. Newburger, del Departamento de Cardiología del Hospital Infantil de Boston (EE.UU.).
Utilizando datos de 26 centros médicos pediátricos de EE.UU. y Canadá, los investigadores revisaron los registros médicos de pacientes menores de 21 años que mostraban síntomas, resultados de laboratorio o hallazgos de imágenes que indicaban miocarditis al mes de haber recibido la vacuna. Los casos de sospecha de miocarditis asociada a la vacuna se clasificaron como «probables» o «confirmados».
De los 139 adolescentes y adultos jóvenes, con edades comprendidas entre los 12 y los 20 años, los investigadores vieron que la mayoría de los pacientes era de raza blanca (66,2%), nueve de cada 10 (90,6 eran varones y la mediana de edad era de 15,8 años. Además, casi todos los casos (97,8%) había recibido una vacuna de ARNm y el 91,4% ocurrió después de la segunda dosis .
El estudio también mostró que el dolor de pecho fue el síntoma más común (99,3%); la fiebre y la dificultad para respirar se produjeron en el 30,9% y el 27,3% de los pacientes, respectivamente.
Aproximadamente uno de cada cinco pacientes (18,7%) ingresó en cuidados intensivos, pero no hubo muertes. La mayoría de los pacientes fueron hospitalizados durante dos o tres días.
Más de las tres cuartas partes (77,3%) de los pacientes mostró evidencia de inflamación o lesión del músculo cardíaco.
Casi el 18,7% tenía al menos una leve disminución de la función ventricular izquierda (contracción del corazón) en el momento de la presentación, pero la función cardíaca había vuelto a la normalidad en todos los que regresaron para seguimiento.
«Estos datos sugieren que la mayoría de los casos de sospecha de miocarditis relacionada con la vacuna en personas menores de 21 años son leves y se resuelven rápidamente», concluye el primer autor del estudio, Dongngan T. Truong, cardiólogo pediátrico en el Intermountain Primary Children's Hospital en Salt Lake City. «Estábamos muy felices de ver ese tipo de recuperación. Sin embargo, estamos esperando más estudios para comprender mejor los resultados a largo plazo de los pacientes que han tenido miocarditis relacionada con la vacunación. También necesitamos estudiar los factores de riesgo y los mecanismos de esta rara complicación».
Los investigadores creen que los estudios futuros deberían monitorizar a los pacientes que han sufrido miocarditis asociada a la vacuna durante un período más largo, ya que este estudio examinó solo el curso inmediato de los pacientes y carece de datos de seguimiento.
Además, hay varias limitaciones importantes a considerar: el diseño del estudio no permitió a los científicos estimar el porcentaje de quienes recibieron la vacuna y desarrollaron esta rara complicación, ni tampoco posibilitó un examen de la relación riesgo / beneficio. Los pacientes incluidos en este estudio también fueron evaluados en centros médicos académicos y pueden haber estado más gravemente enfermos que otros casos encontrados en una comunidad.
«Es importante que los profesionales de la salud y el público tengan información sobre los primeros signos, síntomas y el curso temporal de la recuperación de la miocarditis, particularmente a medida que estas vacunas estén más disponibles para los niños», agrega Truong.
Los investigadores recomiendan que los profesionales sanitarios consideren la miocarditis en personas que presentan dolor en el pecho después de haber sido vacunados frete al Covid-19, especialmente en niños y hombres jóvenes en la primera semana después de la segunda vacuna.
Fuente: ABC
