Cuidar nuestra vista debe ser una prioridad para cualquier persona que desee mantener una buena salud visual. Infecciones tan usuales como los orzuelos pueden ponerla en peligro y tocarlos puede causar más mal que bien.
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Pero ¿qué son y por qué aparecen los orzuelos en nuestros ojos? ¿Qué acciones pueden incrementar el riesgo de padecer esta afección?
¿Por qué salen los orzuelos en los ojos?
Este tipo de infección sucede cuando se hinchan las glándulas sebáceas del párpado y de las pestañas. La misión de estas células es la segregar sustancias para defender el organismo frente a los ataques microbianos.
Los síntomas que sufres cuando tienes un orzuelo son bastante claros: enrojecimiento, sensibilidad y dolor en el borde del párpado, además de la aparición de un bulto redondeado y doloroso.
Cuando se aparece, el ojo se vuelve mucho más sensible de lo habitual, especialmente ante estímulos como la luz intensa.
Estas son las acciones pueden incrementar el riesgo de padecer un orzuelo:
– Tocarse los ojos sin lavarse las manos
– No desinfectar las lentes de contacto antes de colocarlas o hacerlo sin lavarse las manos previamente
– No limpiar adecuadamente el maquillaje de los ojos antes de acostarse
– El uso de cosméticos viejos o caducados
– Tener blefaritis
– Tener rosácea u otras enfermedades de la piel que manifiestan enrojecimiento facial
Mitos y verdades sobre los orzuelos
La aparición de los orzuelos viene, casi siempre a raíz de la proliferación de bacterias cercanas a la zona del ojo. Otros problemas como la blefaritis, el estrés o los cambios hormonales también pueden motivar su desarrollo.
Existen diferentes mitos y verdades sobre los orzuelos, su aparición y la manera de evitar que estos se reproduzcan en nuestro cuerpo. Sin embargo, estos mitos que han prevalecido para tratarlo no hacen más que empeorar el problema.
Por ello, hay que ser precavido con los orzuelos y tener en cuenta estos tips para poder tratarlo de la mejor manera.
- «Si te sale un orzuelo es porque te ha mirado mal una embarazada»: obviamente esta creencia es absolutamente falsa y no es más que un mito que ha proliferado como creencia popular
- «Un chile caliente elimina los orzuelos»: aunque el calor puede ser beneficioso, emplearlo de esta manera puede no ser beneficioso para curar nuestro orzuelo
- «Un orzuelo se cura frotando un anillo de oro contra él»: lo cierto es que esta creencia es totalmente falsa y no ayuda en absoluto a la curación del orzuelo. De hecho, puede ser perjudicial por las bacterias y suciedad que pueden entrar en nuestros ojos
- «Si te sale un orzuelo, tienes que explotarlo»: este mito tan extendido puede resultar muy perjudicial, por lo que es mejor no intentarlo. De hecho, explotarlo puede hacer que este se infecte y que el dolor aumente, por lo que es mejor dejar que evolucione por sí solo
- «Utilizar gafas de sol es beneficioso para curar los orzuelos»: la verdad es que esta afirmación sí es correcta. De hecho, los expertos recomiendan utilizarlas como frecuencia si sufrimos un orzuelo, pues así podremos mantenernos protegidos de la luz intensa
Fuente: ABC
